Para hablar de los inicios del fútbol femenino en España nos remontaremos primero a 1914, año en el que surge el primer club español, el Spanish Girl's Club, club de Barcelona que cesó su actividad el mismo año por la poca aceptación del público, además del estallido de la Primera Guerra Mundial.
En este año se disputó el primer partido registrado de fútbol femenino, enfrentamiento entre el Monserrat y el Giralda, clubes pertenecientes al Spanish Girl's Club. El partido se disputó en el Velódromo Parque de Deportes y se saldó con un 2-1 para el Monserrat. El partido se pudo disputar gracias a la ayuda de Paco Bru y Naciso Masferrer, máximos promotores del fútbol femenino.
En los años 70 surgieron más equipos femeninos, creados casi en clandestinidad, pero finalmente en 1980 la Federación Española de Fútbol reconoció al fútbol femenino, disputándose en 1981 el primer campeonato oficial femenino, la Copa de la Reina. Pero no será hasta 1988, cuando la Federació Española de Fútbol crea la Liga Nacional Femenina, catagorizada como liga amateur o semiprofesional. La Liga estaría compuesta por 9 equipos, siendo la mayoría de ellos catalanes, que serían los máximos promotores de el fútbol femenino de la época.
Tras estos cambios se realizaron un gran número de cambios, el primero en 1996 en el que se dividió el campeonato en cuatro grupos, que englobaban diferentes equipos por zona geográfica, permitiendo la participación de 42 equipos, posteriormente ampliados a 54. No sería hasta el año 2001 cuando se estableció la Superliga Femenina grupo único con 14 participantes, de los cuales el Levante UD se clasificó para representar a España en Copa de la UEFA Femenina siendo campeón de liga.
Tras esto, se fue ampliando paulatinamente el número de participantes de 14 a 16 y de 16 a 24.
Finalmente en 2019 se introdujo un nuevo formato que permite la inscripción de hasta 4 jugadoras extranjeras por equipo, además de un número determinado de jugadoras sub-23 para impulsar la enseñanza base.
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