El Stade de France recibía el día de ayer el primer partido de UEFA Nations League de este año 2020, acogiendo el partido que enfrentaba al a selección francesa contra Portugal.
Los pupilos de Dechamps volvían a jugar la Liga de las Naciones para pelear la primera plaza del grupo ante la campeona del año pasado como es Portugal. El equipo francés estaba compuesto por Llorís bajo palos acompañado por una línea de cuatro defensores formada por Varane, Kimpembe, Pavard y Lucas Hernández; el centro del campo estaba compuesto por Kante como pivote, acompañado por Pogba y Rabiot y como hombre más adelantado Griezmann, situado en la mediapunta; arriba los delanteros por excelencia Mbappé y Giroud.
Portugal llegaba al partido tras el empate contra España en Lisboa, en ese partido mostró unos problemas para definir, ya que dicho partido acabó con 0-0. Fernando Santos sacaba el once de gala con Rui Particio en portería, línea de cuatro para Semedo, Pepe, Rubén Dias y Guerreiro, un centro del campo muy destructivo con Danilo Pereira, William Carvalho y el creativo Bruno Fernandes; para la delantera el pasado y el futuro de la selección Portuguesa Cristiano Ronaldo y Joao Félix, acompañados por Bernardo Silva.
El partido arrancaba en Stade de France con el dominio de la pelota del equipo francés y la presión arriba de Portugal a la espera del fallo del equipo local para castigar de forma inmediata. A pesar de la presión alta del equipo luso, los franceses conseguían zafarse de la presión con triangulaciones rápidas enlazando todas las líneas del equipo, ese movimiento de pelota precipitaba al equipo galo a la portería contraria, logrando grandes ocasiones que pusieron en peligro la portería de Rui Patricio.
El dominio de Francia era claro, aún así Portugal no bajaba los brazos y conseguía aguantar las embestidas del equipo francés, logrando el dominio de la pelota a partir del minuto 20, cuando el equipo galo bajo la intensidad, permitiendo más comodidad para el equipo luso, que comenzó a dominar el cuero. A base de posesión Portugal lograba llegar más y más a portería francesa, sobre todo por ambas bandas con las subidas de Semedo y Joao Félix. A pesar de las llegadas la defensa francesa lograba alejar el peligro de la puerta de Llorís.
Así llegábamos al final de la primera parte con un aburrido 0-0 en el marcador, con Francia un poco más dominadora del partido, pero con una Portugal lanzada por las bandas.
El comienzo de la segunda parte encontrábamos el mismo panorama, Francia dominadora y Portugal a la espera del robo para saltar a la contra. A pesar de la igualdad de los dos equipos, algunos jugadores como Griezmann y Mbappé cambiaron la balanza para Francia. Griezmann lograba tomar el control del equipo siendo el cerebro del equipo, por donde pasaban todos los balones, esto sumado a el incremento en la participación de Mbappé, que lograba encontrar fisuras en la defensa lusa, mostraba el claro dominio de Francia que llegaba cada vez con más peligro a la puerta defendida por Rui Patricio.
El dominio francés forzó a Fernando Santos a reaccionar, el entrenador francés sacaba a Diogo Jota, Renato Sánches, Trincao, Joao Moutinho y Cancelo con la intención de ir a por el partido, sin embargo Dechamps solo introducía dos cambios, Coman y Martial. Estos cambios no lograron revolucionar el partido que acababa como empezó con 0-0.
Portugal con este empate logra mantener el liderato del grupo con 7 puntos, mientras que Francia se sitúan en segundo lugar con los mismos puntos.
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